LA ACADEMIA IV (4)

Dicen las malas lenguas que : “ Quien bien te quiere te hará llorar”.  
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Con la frase anterior con la que se arranca este artículo, todo hace presagiar en dos palabras que `Malo María`, porque lo que resta por escribir hasta el fin del mismo, son unas palabrejas que no tiene buena pinta, y el que no quiera leerlas, pues `viento y que cierre la puerta al salir`. 
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No hace falta tener un coeficiente intelectual con más luces que las de un 'barco pirata', o las de cualquier presidente de los estados wokes, tan woke, que dejan hueco  todo lo que tocan, como el mismo rey Midas, pero su versión más macabra, la del hermano woke del rey Midas. 
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‘Eran pocos y parió la abuela’, y ahora viene la madre 'woca y coja' del wokismo, y es la dictadura woke en Canadá. En un país donde una drag queen dan indiscriminadamente espectáculos gratuitos en bibliotecas públicas de Toronto, a unos niños indefensos, cuya maleable mente aún no ha alcanzado la suficiente madurez para discernir entre lo que está bien, y lo que no. 

Por no haber libertad, ya no hay ni en las delegaciones de universidades europeas en Toronto te permiten opinar con escrupulosa educación, y te expulsan a la mínima de cambio. Hechos, no palabras. 
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Definir el wokeismo es para estar escribiendo largo y tendido sobre un fenómeno que es la continuación del comunismo, pero esta vez con la ayuda de internet, la robótica, la inteligencia artificial, y con China a las puertas del liderazgo mundial, si Dios no lo remedia, y este panorama pinta muy mal, y va a durar más que un 'día sin pan'. 
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Enfrentarán a sociedad, unos con otros, hombres contra mujeres, rojos contra azules, razas contra razas, etc, matarán en vida, o al hoyo a los pensadores, acabarán con lo poco que queda de Dios de Abrahan, llenarán las ciudades más importantes de bárbaros sin romanizar, ni cristianizar, adoctrinarán en las escuelas y universidades, vaciarán hasta la última gota de de su esencia masculina  a los hombres, fomentarán la ruptura de parejas, los niños y niñas pasarán a pertenecer al estado, antes que a una pareja monoparental, acabarán con el disidente de la manera que sea, como dejarlo sin trabajo. Al ciudadano lo aborregarán, lo anababetizarán, y empobrecerán hasta la saciedad, creando una sociedad sin justicia justa, prensa vendida al poder, y temerosa de las repercusiones al que piense distinto de lo que dicta el pensamiento único. Ni Carlitos Marx en sus sueños húmedos pudo imaginar un mundo como el que nos espera. 
 
¿Os suena?
 
Ésto pasa ya en muchos países, pero es la punta del iceberg, porque ahora viene lo mejor de la función. No se vayan  todavía, una y más’.
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El dinero será digital, tal y como sucede en China desde hace años,  y el móvil, además de banco personal,  convertirá en el mayor policía, permitiendo a los seres humanos comprar sólo lo que ellos, los todopoderosos del estado central, quieran que hagamos con nuestro dinero, empezando por prohibir ciertos libros, sin necesidad de quemarlos, porque la celulosa del papel quedará reemplazada por el silicio de la nube.  
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No se trata de un mundo distópico de Orwell, un magnífico escritor inglés que se habría quedado más ‘corto que las mangas de un chaleco’, sobre lo que dejó escrito en su obra distópica “ 1984”, y hasta la distópica realidad en el mundo del 2025 supera al mencionado libro  de Orwell. En muchos países ya estamos en el acabose del empezose’ de la era woke. 
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Lo mejor es dejar de escribir, porque se me están ‘calentando’ los dedos más de la cuenta, y podría dejar escrito algo de lo que me pueda arrepentir, y lo escrito es eterno, mientras que las palabras orales se las lleva el viento, y si no, que se lo digan a los sumerios, o la los griegos. 
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Un momento, ¿Quién ha dicho que la batalla está perdida?
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Dios nos hizo a los seres humanos como  únicos seres en el universo que llevamos a Dios dentro de nosotros, y Dios no iba a permitir que nadie nos haga daño, por eso han llegado unos líderes de todos los lugares del mundo, que sin necesidad de mencionar a ninguno de ellos, tiene la misión de acabar con esta locura de wokeismo, o el fin el ser humano. 
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La batalla no está perdida, y no ha hecho nada más que empezar, aunque a partir de ayer tengamos un ‘palo más en las ruedas’ de esta lucha del bien contra el mal, con el país que se puede convertir en la locomotora del wokeismo, Canadá. 
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Mucho de lo que pueda pasar ya ha sido escrito en “ La Academia IV”. Por cierto, Atacama también está en Argentina, y disculpas por mi ignorancia geográfica, ya que escribir es lo primero que me pasa por la cabeza, con todo lo que he aprendido en esta vida.Escribí sobre el desierto del Gobi, con GGK, en el Sahara con un legionario, y ahora en Atacama con la Academia. Lo próximo será el Yukón, donde hay mucho por descubrir, y sólo Daniel y Candela lo saben. 
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Ahora empieza la pinza de China con la EU, Méjico y Canadá contra los  Estados Unidos. A buen entendedor, sobran palabras, y a ver cuándo me puedo beber un cubata de Jack Daniels en Canadá, sea literalmente escrito.