top of page


LA HIGUERA DE LA MERCED
Del yukón a la Patagonia
Pincha sobre play y disfruta del audio
El fin de la humanidadToronto
00:00 / 15:03
La gran tribulación entre distopía y realidad
Cuando escribí hace unos años un escenario apocalíptico tras una gran guerra nuclear en el mundo, y recientemente utilicé el mismo escenario para poner la guinda en un libro titulado “La higuera de la Merced”, que forma parte de una trilogía del “Diario de Candela”, que pertenece al género de la realidad mágica, en un mundo entre real y distópico.
ā
Nunca pensé que el término homológico no formaba parte de mi imaginación, sino que era algo que existía en la realidad del año 2025, en una ciudad conocida como la nueva Babilonia del siglo XXI, que se encuentra en el continente americano.
ā
No hace falta más que asomarse a la calle para ver lo que está pasando en una ciudad donde el ser humano ha dejado de existir. La avaricia no tiene límites, hasta que llega a romper el saco, y en esto tiene mucho que ver el dinero, y los bancos, que son muy necesarios para el bienestar de una sociedad, siempre y cuando, no se conviertan en santuarios, y desbanquen a Dios de Abrahán.
ā
La ciudad de Babilonia existió en la antigüedad, se destruyó por completo, y ha vuelto a nacer en el año 2025, pero esta vez no sobre sus ruinas en Mesopotamia, lo que sería hoy Irak, en la ribera del río Éufrates, y fue la capital del reino babilónico, una potencia militar, y un centro de arte y cultura más avanzado de la época.
Grandes personajes pasaron por Babilonia, como su rey Nabucodonosor II, y el mismo Alejando Magno moriría en ella, a la misma edad que Jesús, con 33 años, allá por el siglo IV a.C.
ā
La Babilonia antigua contaba con una de las poblaciones más numerosas de todas las ciudades más conocidas en su época, además de ser una ciudad con una doble muralla que protegía a sus ciudadanos, y a sus numerosos templos y lugares públicos donde la cultura jugaba un importante papel, sin olvidar a sus jardines colgantes.
ā
Tras un Apocalipsis, la Babilonia antigua quedó completamente destruida, en la que unas pocas piedras son fiel testimonio de lo que en su día tuvo que ser una de las principales ciudades de la antigüedad en Occidente.
Algunos lo atribuyen a un castigo divino de Dios, otros al paso del tiempo por las diferentes guerras, y los más incrédulos, no saben realmente cómo dejó de existir.
Sea como fuere, en esta vida nada es eterno, y lo que tiene un principio tendrá un final, como es el caso del universo, con todas sus estrellas. Lo único infinito es el tiempo, o Dios, algo que los seres humanos nunca llegaremos a entender, salvo el día que lo podamos detener.
ā
Babilonia pasó de ser la joya de la civilización de aquella época, a quedar como un mero 'juguete' para goce y disfrute de los arqueólogos del siglo XX y XXI, con una connotación negativa, ya que en la Biblia se asociada a Babilonia con la “La Ramera”, como si del mismo anticristo se tratara, y por si esto fuera poco, se le concedió el rango de la ciudad del reino de las siete cabezas y diez cuernos, como determinó el profeta Daniel en el Antiguo testamento, y más adelante San Juan en el Nuevo Testamento.
¿Quién les diría a los ciudadanos de la antigua Babilonia en el siglo IV a.C., que dentro de unos siglos desaparecerían como ciudad, además dejarían de existir sus dioses, y para colmo, la llamarían la ciudad Ramera?
ā
Un momento. ! Pare usted 'la cinta del casete'!
¿Quién ha dicho que Babilonia ha desaparecido?
La energía ni se crea ni se destruye, tan solo se transforma.
Babilonia ha vuelto a nacer en el siglo XXI, en una ciudad que ha dado por completo la espalda a Dios de Abrahán, y el wokismo de Soros y su banda de todopoderosos ha hecho mella, a tal punto de cambiarla por completo, y convertirla en la nueva Babilonia.
ā
Los valores iniciales grecorromanos judeocristianos, teñidos de la cultura anglosajona, han dado lugar a una nueva civilización, como fruto de la simbiosis entre culturas 'invasoras' de Asia, predominantemente de China, con un nuevo dios, el dios dinero, y unos bancos que han tomado la batuta de una sociedad que los ha convertido en sus santuarios, y dentro de nada estarán hasta en los móviles, tal y como se vaticina en el libro que responde al título de “La Academia IV”.
Al igual que sucede en China, el ser humano ya no adora al Dios cristiano, sino al estado, con lo que al no considerar que los hombres ya no son hijos de Dios, pasando a ser los esclavos perfectos del estado central, en una sociedad deshumaniza por completo, y se pierde el papel fundamental que jugaba una familia, que junto con el del Dios cristiano, eran los pilares de fundamentales sobre los que se sostenía una civilización que ha muerto por completo, y que fuera conocida en esta nueva Babilonia como la civilización Occidental.
En la nueva Babilonia ya no existe Dios, salvo los cristianos hipócritas que van a las iglesias a hacer el ‘paripé’, las familias se han roto por completo, y los hijos pasan a ser propiedad del estado, exactamente igual que sucede en China.
ā
Si un día el futuro estado central dijese que no hay que tener más de un hijo, toda la población le obedecería a ‘pies juntillas’, porque el estado es Dios, y el ser humano ya no se considera hijo de Dios, ni creado a imagen y semejanza de Él.
Se trata del nihilismo de la nueva Babilonia en estado puro, materializado en una sociedad que pasó de cristiana, a laica y acabó dando por completo la espalda a Dios.
ā
¿Qué le sucedió a la antigua Babilonia cuando sus ciudadanos degeneraron por completo? A buen entendedor, sobran palabras.
Lo mimo se podría decir si unas juezas y fiscales acusaran a los hombres sin pruebas, y los condenasen a penas injustas, como está pasando en un país llamado España, que cada día se parece más a la nueva Babilonia.
ā
En la nueva Babilonia del año 2025, ya deshumanizada, y sin Dios, donde cobra especial relevancia el aborto, la eutanasia, el abandono de ancianos, y otros tantos males de la sociedad, como el no ser solidario para ayudar al débil o al necesitado, porque ya no son productivos para el estado, y se llega a pensar que eso era cosa del cristianismo, pero ahora es algo retrógrado e innecesario, como tener una familia, o empatía por el ser humano, y mucho menos creer en un Dios Creador.
ā
En eso se van convertido muchas ciudades de los mal llamados países ricos, una nueva Babilonia a imagen y semejanza de China, donde el wokismo ha conseguido acabar en 10 años con Occidente, y los términos fraternidad, solidaridad y libertad brillan por su ausencia.
Pobre de aquel disidente que se salga del pensamiento único establecido por el estado, porque se atendrá a las consecuencias, y las futuras ciudades del estado central cuenta con muchos medios para castigarlo, como unas leyes injustas, o juzgados de la muerte.
No se trata de un cuento distópico, o ciencia ficción mezclada con realidad mágica, de uno de los libros de Jemm. Desgraciadamente, lo dicho anteriormente va a ser el 'pan nuestro de cada día' en el resto del mundo, y poco a poco, este modelo social de la nueva Babilonia se irá extendiendo como la pólvora, y será replicado en todas las ciudades y naciones del mundo, creando así una bestia de siete cabezas, que se convertirá en una Ramera, con la forma de un estado único central, a la imagen y semejanza de China, que conllevará la desaparición por completo del ser humano, tras una tribulación y un apocalipsis, como pasase en su día con la antigua Babilonia.
!Señoras y señores!, tenemos el gran placer de ser el último eslabón del ser humano, así que los que hemos nacido en el siglo XX, disfrutemos de tal honor, y vivamos con intensidad los días que nos queden de vida, antes de poder ver con nuestros ojos como el ser humano va desapareciendo de la faz de la tierra, y será remplazado por un nuevo ser, con un nuevo dios.
ā
Babilonia no ha muerto, ahora se llama.....
ā
Mas información en “La higuera de la Merced” de Jemm.

bottom of page