Sirva de aperitivo las imágenes anteriores, para preguntarse de nuevo si es más importante ante un árbol, una mascota, una bandera, o la menopausia frente a los seres humanos más débilies de una sociedad, que sufren y mueren en silencio, sin que nadie se ocupe de ellos, y queden encerrados en homológicos, peor que las reservas. 
 
Vaya por delante,y sin reparos que no tengo absolutamente nada contra ninguna bandera, incluida la bandera de colorines. 
Cantaba mi abuelo que en paz descanse, una canción que comenzaba así: “ De colores, de colores se visten los campos en la primavera (...)”
Ahora lo que se viste de colores es la nueva Babilonia del siglo XXI, y ya lo creo que se viste, porque tenemos la bandera hasta en la sopa en todo el mundo WOKE.
 
Hechos, no palabras que lo demuestran con fotos. 

Los que no me parece lógico es que unas víctimas se hayan convertido en los verdugos, y 'paguen la fiesta' los más débiles, que no tienen culpa de nada, ni disponen de medios para defenderse ante las injusticias de la sociedad. 

Cuando una ciudad ha se ha 'ganado a pulso' ser conocida como la Ramona, valga como eufemismo, por no escribir “La R... del siglo XXI”, entonces todo es posible, y se crean una especie de homológicos, zoos de seres humanos en grandes ciudades,  donde se confinan los ciudadanos y esclavos que les estorban, o bien ya no les sean de utilidad al macabro sistema social diseñados por los todopoderosos del wokeismo, porque el ser humano dejó de existir en esa ciudad, y si Dios no lo remedia, será en todo el país, un país que era el mejor del mundo hasta que hace unos pocos años llegó la banda de Soros. Esto acabará por extenderse a todo el mundo, y China habrá ganado la batalla, porque un mundo sin libertad, en donde el estado es Dios, eso es China. 

Si el Dios de Abrahán ha muerto, nos encontramos con un homo sapiens sin alma, luego son unos desalmados, y los sentimientos antiguamente atribuidos al ser humano, como la empatía, la solidaridad, la fraternidad, etc., son una falsa ilusión que se le da a este nuevo ser que ha sido llamado para sustituir al ser humano, y la libertad brilla por su ausencia, haciendo creer al nuevo ser que gozan de una especie de libertad que realmente es la misma libertad que creen que tienen los coreanos del norte, o los chinos en China. 
 

Como los ingenieros no damos nada por válido, que no sea demostrado con un método cartesiano, este fin de semana me he dado un paseo por la Ramona, y he podido inmortalizar mis pensamientos, con unas fotos, que añadidas a otras tomadas hace nos pocos meses en la misma Ramona, demuestra mi tesis sobre desaparición del ser humano, en donde un paño coloreado que representa una bandera tiene más valor que la vida de un ser humano, pero ahí no para la cosa, porque una mascota es considerada por encima de los seres humanos, y quien crea se concluye aquí la película, está muy equivocado, ya que el ‘hermano árbol’plantado en la Ramera  tienne más atenciones a los cegados ojos de  las instituciones públicas, que un ser humano débil que viva en el inframundo de la Ramona,  que necesite oportunidades, por parte de una rica y acaudalada sociedad en la que vive atrapado en un homológico sin salida, y si alguien  le echa una mano, será al cuello, porque ¿es que ya no hay ni un solo hombre bueno y justo que viva en esta sociedad?